"Regino, mi querido lagostino
con andares de pingüino
aunque seas adicto al vino
y abandonares el pepino
yo te quiero tal cual eres
aun comiendo rico cochino.
Estimado estornino
de mar alejandrino
y olfato de canino
a medio camino
entre lo masculino
y lo femenino
como siempre genuino
mi cartagenero tan divino
a ver si llegas a interino
y me invitas a otro rollo
rollo pollo de bobino.
Mi aladroque marino
estos versos yo te escribo
con tantisimo cariño
de su barriga verde,
a ver si atino:
¡Felicidades, cebollino!"
2 comentarios:
Mmm, me chiflan estos versos. ¿Quién es esa tal Manuela? Debe conocerte muy bien pues algo de pingüino sí que tienes;)
Anónimo
jajaja, qué bueno!! "Aunque abandonares el pepino...", me encanta!
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