no hace falta decir nada:

"Vals con Bashir" me ha dejado sin palabras, nunca mejor dicho. Siempre me ha encantado escribir y leer, el poder de la palabra me fascina, con ella podemos crear mundos, modificarlos, crear personajes insólitos...en definitiva, crear una realidad paralela, pero realidad al fin y al cabo. Pero no únicamente la palabra tiene este poder, las artes plásticas, la pintura, la fotografía...también tienen este "poder". Hacía tiempo que las imágenes no me impactaban tanto. En el cómic Vals con Bashir las palabras están por estar, no son necesarias, las escenas son desgarradoras y te dejan en un estado de perplejidad aplastante. Lo que me sorprende es que un cómic que trate el tema de la guerra logre ser en verdad todo un tratado de la capacidad del ser humano para crear. El personaje principal de esta historia podría ser un ejemplo perfecto para ser conscientes que todos buscamos lo mismo, una vía de escape. Crear es una de ellas. Sacad a pasear vuestros ojos por estas páginas, las imágenes os impactarán.